Familiares, empresarios y amigos dan el adiós a Emilio Botín

Los restos mortales de Emilio Botín descansan ya en el panteón familiar de la finca de los Botín en Puente de San Miguel (Cantabria). El entierro se ha celebrado en las más estricta intimidad con la única presencia de familiares, allegados y amigos más cercanos.
La familia del banquero que convirtió el Santander en el mayor banco de la zona euro y en uno de los mayores del mundo quiso despedirle en un acto íntimo. Pero dada su proyección pública, finalmente decidió abrir la capilla ardiente, instalada en la casa palacio del "Promontorio", una antigua residencia familiar en Santander, a numerosas personalidades del mundo de la empresa y las finanzas, que acudieron este jueves junto a los familiares y allegados al acto de despedida del banquero.
Entre los que se han desplazado hasta Santander para asistir a la capilla ardiente, ubicada frente al Palacio de la Magdalena, se encontraban el presidente de BBVA, Francisco González; de Iberdrola, Ignacio Sánchez-Galán; de Endesa, Borja Prado; y de Bankinter, Pedro Guerrero; de Havas, Fernando Rodés; además de la consejera delegada de Bankinter, María Dolores Dancausa, y el financiero Juan Abelló.
También acudieron el expresidente cántabro Miguel Ángel Revilla; el actual presidente de la Comunidad, Ignacio Diego; y el alcalde de Santander, Íñigo de la Serna. Matías Rodríguez Inciarte, vicepresidente de Santander; Alfredo Sáez, ex consejero delegado del banco; el empresario Alberto Cortina; y Rodrigo Echenique, ex consejero delegado de Santander y ahora presidente de Vocento, también viajaron a Santander para despedirse de Emilio Botín.
A la salida del velatorio, González destacó el papel relevante de Emilio Botín en la historia de las finanzas españolas. Sobre el nombramiento de Ana Botín, aseguró que está, "por supuesto, bien preparada para el cargo". Por su parte, Galán dijo de la nueva presidenta que "es difícil encontrar a una profesional con su currículum y su nivel".
El entierro se ha celebrado en la finca que posee la familia en Puente San Miguel, a treinta kilómetros de la capital, donde reposan los restos de su padre y su abuelo, junto a la ermita en la que se celebraron muchos acontecimientos familiares.
La salida del cortejo fúnebre, formado por una decena de vehículos, acompañado por la familia Botín y escoltado por la policía de Santander se produjo entre los aplausos de las personas que se encontraban cerca del Promontorio.
El funeral está previsto para el sábado en la catedral de Santander y, el lunes, la ciudad vivirá la primera junta general del banco con Ana Botín como nueva presidenta.