- The Register asegura que el canal de distribución de la compañía Dell en Reino Unido les había informado que la firma estadounidense habría aplicado una subida del 10% en los precios a sus minoristas.
- Tamron, Hoya, Velbon y Tamrac, planea aumentar sus precios entre un 10% y un 12%.
REINO UNIDO.- Ya lo decía días atrás el periódico The Guardian: los ordenadores y el chocolate podrían subir sus precios en el Reino Unido después del brexit. Y se ha cumplido. Al menos, en lo que se refiere a los dispositivos tecnológicos. Algunas compañías ya han tomado la determinación de compensar la caída del valor de la libra con una subida de precios de sus equipos en ese país.
El fabricante estadounidense de ordenadores, Dell, y OnePlus, el cada vez más popular fabricante chino de smartphones, han anunciado esa estrategia de forma oficial. La primera justificó la medida asegurando que los componentes que deben adquirir para fabricar sus PC tienen sus precios en dólares, y que el desplome de la libra frente a la moneda estadounidense ha disparado sus costes.
Dell no ha especificado públicamente cuánto subirá sus precios y ha asegurado a la BBC que ha retrasado todo lo que ha podido esta decisión. Sin embargo, The Register asegura que el canal de distribución de la compañía en Reino Unido les había informado que la firma estadounidense habría aplicado una subida del 10% en los precios a sus minoristas. Un incremento que previsiblemente estos trasladarán a sus clientes finales. Dell aclaró en un comunicado que los productos de consumo no se verán afectados por esta subida, al menos inmediatamente.
El fabricante de teléfonos inteligentes OnePlus, por su parte, ha precisado que elevará el precio de su último buque insignia, el OnePlus 3, 20 libras, de 308 libras a 329 a partir de este lunes. Su argumento, el mismo. La libra, que ha alcanzado estos días su mínimo frente al dólar en 31 años, ha bajado más de un 12% desde la víspera del resultado del referéndum para el brexit, algo que dificulta proteger “sus estrechos márgenes”. OnePlus no aplicará ninguna subida a los accesorios de sus teléfonos, según precisó.
Otra empresa que ha decidido llevar la misma estrategia es Intro 2020. La firma, importadora en Reino Unido de accesorios de cámaras fotográficas de diferentes fabricantes como Tamron, Hoya, Velbon y Tamrac, planea aumentar sus precios entre un 10% y un 12%, según la cadena británica.
Aunque esta no es la primera vez que se producen ajustes de precios en algunos países debido a las fluctuaciones de las monedas –en el pasado, Apple, por ejemplo, subió los precios de su hardware y de la App Store en Canadá, Australia, Japón y Europa, entre otros mercados– publicaciones del Reino Unido animan a los usuarios a adquirir aquellos dispositivos a los que hayan echado el ojo, porque los expertos esperan que más empresas se sumen a la estrategia de subir precios para mantener márgenes.
Y es que, ante este nuevo escenario, los expertos predicen más aumentos de precios en el sector TIC. Las próximas compañías que podrían subir el precio de sus productos en Reino Unido son Lenovo, según ha informado Bloomberg, y HP, el primer y segundo mayor fabricante de ordenadores del mundo. El fabricante chino, también propietario de la marca Motorola de móviles, está considerando aumentar sus precios, además de admitir que está buscando otras medidas adicionales para compensar la caída de la libra. “No creo que subir el precio sea la única manera de hacer frente a esta situación”, aseguró Wai Ming Wong, director financiero de la multinacional china. El directivo no ha querido aclarar si entre las medidas que baraja la compañía estaría el recorte de plantilla en Reino Unido.
Por su parte, HP no ha sido tan explícita. Pero, un portavoz de la compañía ha asegurado que están evaluando cuidadosamente la situación tras el brexit para comprender mejor qué impacto tendrá en sus cuentas. “Mientras tanto”, añadió, “seguiremos trabajando activamente con nuestras operaciones del día a día y apoyando a nuestros empleados, clientes y socios”, según recoge The Register. “Al igual que otras multinacionales, nosotros ajustamos los precios en función de las fluctuaciones en los tipos de cambio”, añadieron.
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