¿Podrías pensar en algún producto que deseas y no se venda en México? Seguramente te costó trabajo imaginar alguno puesto que en nuestro país se encuentran casi todas las marcas de clase mundial. Esto se lo debemos a la apertura comercial que comenzó con la firma del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN, 1994). Hoy podemos disfrutar de los mejores productos, sin embargo, esto ha traído retos importantes, como el aumento en la competencia porque también ella es de clase mundial. Por ello, Mundo Ejecutivo, por segundo año consecutivo, da a conocer su ranking sobre empresas consultoras y ofrecerte una radiografía del sector.
Hoy los negocios son cada vez más complejos y se lo debemos a un consumidor cada vez más exigente y volátil. Aunado a ello, la competencia se hace cada vez más fuerte debido a la tendencia de formación de bloques regionales, la interdependencia de los países, así como los sorprendentes avances tecnológicos que han hecho a los mercados más competitivos. En el ahora las organizaciones deben tener socios de negocios que nos permitan tener un desarrollo fuerte y confiable, es decir, empresas consultoras de nuestro país.
Los beneficios cuestan
Hay que hacer notar que este proceso complejo y difícil puede ser perjudicial para las organizaciones si no realiza un análisis estratégico, serio y riguroso para la toma de decisiones. Hace apenas algunas décadas la política empresarial no era la conquista del mercado internacional, sino tener éxito en el país y sobrevivir a este mercado.
En México era casi imposible hace treinta años salir al mercado internacional, también debido a la política proteccionista que el gobierno impuso, cómodamente a los empresarios nacionales, lo cual cambió radicalmente con la apertura comercial.
En la actualidad competir en los mercados es costoso para las empresas. Tienen que invertir en mercadotecnia, innovación tecnológica, mejor personal, etc. Este hecho hace que para compensar dichos costos la empresa deba generar valor a sus socios, clientes y accionistas. Por tanto, la meta para éstas es obtener una ventaja competitiva que les permita superar a la competencia, la cual puede venir de varias fuentes. Las que nos ocupan en este ranking son la de conocimientos específicos de tipo tecnológico, la de capacidad de dirección y gestión empresarial, la de comercialización, la de distribución de bienes y servicios, la legal, la de capacidad organizativa y directiva, la de capacidad para crear nuevas tecnologías y la de posesión de recursos generadores de ingresos, donde no hay mejores socios que las empresas consultoras.
Este conocimiento, que se ha pasado generación en generación, hoy es especialmente útil para las compañías, pues les ayuda con el análisis de riesgo y con la toma de decisiones para el negocio.
Para las Pymes, podría reducir la estadística de muerte temprana; mientras que la gran industria no está exenta, pues cada fase por la que transita la empresa requiere mayores capacidades, fundamentalmente estratégicas, y por ende, conocer el mercado se hace imprescindible para poder minimizar el riesgo al que está expuesta.
Renovarse y vivir
El mercado exige a las empresas un proceso innovador constante, es decir, un cambio completo en estructura organizativa, misión, objetivos a corto, mediano y largo plazo, programa de mercadotecnia y, por lógica, condiciones de producción y del producto.
Esto nos queda claro cuando se analiza cuántas empresas que fueron icono de su industria en el pasado y no se renovaron desaparecieron o están a punto de hacerlo, puesto que el mercado es frío y no perdona, como Kodak, BlackBerry, Polaroid, entre otras. Por ello, se deben tomar decisiones creativas que se adapten a las condiciones de mercado y con las posibilidades infinitas que deben tomar las empresas de hoy.
Pero sólo se puede tener éxito en el mercado cuando las compañías tienen claridad acerca de las ventajas que desean alcanzar y hacia qué océanos tendrían que navegar, y eso en gran medida se lo proveen las empresas consultoras. La decisión de a qué mercado ir podría ser algo que resuelvan mediante la moda o por la influencia de otros competidores, y eso no necesariamente es algo correcto.
Información y conocimiento
Existen varios tipos de conocimiento; uno de ellos es el propio, llamado Know How, que las compañías son las que desarrollan mediante la experiencia, el cual les permite realizar sus propias estrategias debido al cúmulo de información que ya han adquirido, pero si no cuentan con este Know How, lo mejor es obtenerlo por medio de una empresa de consultoría. No hay costo más caro que salir del mercado, y si no inviertes con especialistas, podría pasarte.
Las consultoras asesoran a las compañías en las distintas áreas mencionadas, y son fundamentales para su administración. Al contratar a una consultora de calidad ellos se convertirán en socios de negocios, pues te acompañarán en ese sinuoso camino llamado mercado competitivo.
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