Australia.- La aerolínea Virgin Blue no permitió que un hombre viajara junto a dos niños a quienes no conocía, una acción que ha generado una gran polémica en Australia debido a que las políticas de vuelo de la empresa estigmatizan sistemáticamente a todos los hombres como depredadores sexuales. Ante esta situación abogados de este país han decidido optar por crear el comité de discriminación masculina, el cual lucha por que los hombres no sean atacados por las empresas que alegan que han creado estas normativas basándose en las experiencias de sus clientes.
John Mcguir, un pasajero que viajaba en la lujosa aerolínea Virgin Blue, denunció la empresa aérea por considerar que fue víctima de discriminación "solo por ser hombre", además de sentir cómo la mirada del resto de pasajeros lo condenaban por algo que no había ni siquiera pensado.
“Una azafata se me acercó para pedirme que me cambiara de asiento, ya que solo por ser hombre no podía estar junto al lado de dos niños a los que no conocía”, relató el hombre al noticiero Today Tonight.
El hombre también señala que una solución para este problema y evitar incomodar a los pasajeros es que los asientos de niños no sean vendidos a ningún adulto, “algo que no le conviene a la empresa por que pierden una venta”, argumentó.
La discriminación sistemática de los hombres por ser hombres llega a las escuelas
La situación también ha llegado a las escuelas, donde el número de profesores del sexo masculino ha disminuido en gran cantidad debido a que prefieren evitar demandas o malos entendidos debido a estas políticas.
De acuerdo a un informe presentado por dicho noticiero, en Australia cada vez son más hombres los que son detenidos por las autoridades por mostrar su afecto a los niños -que generalmente son sus hijos- en la vía pública, práctica que no sucede con las mujeres.
Políticas que trta a todos los hombres son tratados como pedófilos
Esto en gran parte por las políticas que se han establecido en diferentes lugares e instituciones de Australia como aerolíneas, parques, salas de estar y balnearios, entre otros, que tratan a todos los hombres como si ya fueran pedófilos comprobados.
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