- Torres produce sesenta millones de litros de vino por año, con una facturación de 300 millones de euros (unos 330 millones de dólares) a partir de 2.000 hectáreas de cultivos en España, Chile y California (EEUU)
ESPAÑA.- La compañía vinícola Torres, una de las mayores de España, presenta estos días en Sao Paulo, la mayor ciudad de Brasil, su nueva línea de vinos en la que apuesta por la producción de los pequeños agricultores de Cataluña, al noreste de España, según ha afirmado el director general del grupo.
En una degustación con catavinos y prensa especializada brasileños, la vinícola fundada hace cinco generaciones ha resaltado la elaboración de nuevos vinos a partir de cepas originales de España, en una apuesta que surgió después de la crisis.
"Anunciamos que estábamos procurando nuevas cepas de uva y que si alguien tuviese alguna planta que no conociese podría buscarnos", ha explicado a Efe Miguel Torres Maczassek, quien está al frente de la vinícola desde 2012.
Después del anuncio, agregó Torres Maczassek, "recibimos 45 nuevas plantas y, de esas, seis eran especies catalanas ancestrales, en las cuales invertimos para producir vinos de mucha personalidad y calidad".
Latinoamérica, principal mercado
Torres produce sesenta millones de litros de vino por año, con una facturación de 300 millones de euros (unos 330 millones de dólares) a partir de 2.000 hectáreas de cultivos en España, Chile y California (EEUU). Los vinos son comercializados en 160 países y Brasil es su principal mercado en Latinoamérica.
La historia de la vinícola comenzó en el siglo XIX en Cuba, cuando Jaime Torres decidió ir a vivir en ese país caribeño y después de su retorno a España fundó la empresa que después de cinco generaciones sigue controlada por la familia y mantiene vínculos con la isla.
Un vino Milmanda 2012, que también fue presentado en Sao Paulo, fue con el que brindaron los presidentes de Estados Unidos, Barack Obama, y de Cuba, Raúl Castro, en su primer encuentro en la isla después de restablecer las relaciones diplomáticas.
La presentación en Sao Paulo, realizada el jueves, comenzó con el Viña Esmeralda, uno de los más populares de la marca, de sabor suave y mediterráneo, típico da Cataluña, y luego con el Milmanda 2012, un Chardonnay español producido en una hacienda del siglo XII.
El Fransola, 100% tempranilla -uva típica de España-; el Altos Ibéricos, el Salmos de Priorat; el Floralis, un moscatel oro para sobremesa, y otros vinos de la región de Penedés, como el Gran Corona Reserva y Mas La Plana, también integran la oferta para Brasil.
Los precios por botella en Brasil oscilan entre los 85 y 465 reales (entre unos 26,2 y 143,6 dólares). Otros vinos como Pirene, Forcada y Moneu todavía se encuentran en fase experimental para el mercado brasileño.
En su presentación, Torres Maczassek, destacó la inversión de diez millones de euros (unos once millones de dólares) desde 2007 para proyectos de energía renovable, uso de agua y transporte eco-eficiente para poder reducir en un 30% la emisión de gases de efecto estufa en los países en los que la vinícola produce.
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