El grupo español Luzinterruptus cubre las calles de Toronto con un mar de libros iluminados

• Sus intervenciones son extraordinariamente efímeras, muchas veces tardan en desaparecer menos de una hora, ya que sus pequeños artilugios luminosos despiertan en los espectadores grandes deseos de hacerse con ellos

CANADÁ.- Toronto se despertó hace unos días con una grata sorpresa: algunas de sus avenidas se habían inundado con libros iluminados, creando una de las imágenes más bellas y mágicas que hemos visto. Miles de amantes de los libros se han lanzado a la calle para poder caminar sobre este torrente literario, porque no todos los días puedes flotar en cultura, literalmente hablando.

Este propósito ha sido titulado Literature vs. Traffic, la obra maestra del conjunto español Luzinterruptus, una asociación anónima que efectúa lo que ellos llaman “intervenciones urbanas en lugares públicos”. Para eso han contado con más de 10.000 libros, donados por librerías de la zona, a los que han agregado luces LED entre sus páginas para inventar este increíble espectáculo visual que adorarás si eres una enamorada de los libros.

Esta obra manera parte de la Nuit Blanche 2016, un festival de arte que tiene lugar durante la noche en la ciudad canadiense. Sin embargo, Literature vs. Traffic se mantendrá hasta el mes de junio, incluyéndolo en el festival de luces de invierno que se festeja en Toronto.

“Por la noche, un espacio reservado a la velocidad, el ruido y la contaminación se transformará en un espacio silencioso, calmado e iluminado vagamente por la tenue luz que sale de estas páginas” -Luzinterruptus.

Gracias a este equipo de iluminadores la literatura ha tomado el control de las calles de Toronto. Toda una declaración de pretensiones que busca fomentar la lectura y la cultura. De hecho, cualquiera es exento de coger libros y llevárselos a casa, reciclando el propósito de la manera más educativa y bonita posible.

Sobre Luzinterruptus

Son un colectivo artístico anónimo, que llevan a cabo intervenciones urbanas en espacios públicos. Utilizan la luz como materia prima y la noche como lienzo.

Los componentes del equipo vienen de disciplinas como el arte y la fotografía y han querido aplicar su creatividad en una acción común, dejar luces encendidas por la ciudad con la intención de que otros las apaguen.

Empezaron a actuar en las calles de Madrid a finales del 2008 con la simple idea de poner un punto de atención luminoso a problemas que detectaban en la ciudad y que parecen pasar desapercibidos a las autoridades y a los ciudadanos.

Pero no todo lo que hacen tiene un punto subversivo, en algunas ocasiones simplemente quieren embellecer, o sacar del anonimato, lugares o rincones que les parecen especiales u objetos a los que otorgan un valor artístico extraordinario, aunque hayan sido dejados al azar, en la vía publica, sin ninguna intención artística, por gente anónima.

Y todo esto lo llevan a cabo con el material que mejor conocen y más les inspira, la luz, que además de proporcionar un gran impacto visual, les permite hacer intervenciones en algunos casos mínimas y en otros más extensivas, sin deteriorar el mobiliario urbano y sin privar de escenario para trabajar a otros artistas o a los propios usuarios de un espacio común, que escasea en las grandes ciudades.

 Esto no nos importa en absoluto, muy al contrario, nos parece interesante que alguien pueda interpretar, que lo que hemos dejado en la calle, es un pequeño presente para el que tuvo la suerte de encontrarlo.

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